Entradas populares

miércoles, 6 de abril de 2011

¿Libertad de "presión" o expresión?


Roberto Quesada

“La libertad de expresión es decir lo que la gente no quiere oír.” 
George Orwell

Sí, así, de presión no de expresión. Tanto se habla de la libertad de expresión, libertad de prensa, pero si uno se lo plantea en serio, en realidad no existe tal ‘libertad’ en ninguna parte. En realidad toda libertad es relativa. ¿Podrá existir alguna vez la libertad de expresión? Lo dudo. Toda esa libertad por la que tanto se discute está condicionada a muchos factores, y especialmente al económico.


Entonces se escribe, se informa o deforma, dependiendo de la ‘presión’ que el medio ejerce sobre quienes ejecutan las noticias y las opiniones. Puede ser que para un editor no sea importante lo que enfoca un periodista o un escritor, pero quizá para quien escribe equis cosa sí lo sea. Incluso, a veces es importante escribir sin decir nada, por el simple hecho de que alguien quiera nada más regodearse con el lenguaje: crear imágenes, metáforas, juegos lingüísticos, pero puede resultar que un editor piense que eso es pérdida de tiempo, que no gustará a los potenciales lectores/as, oyentes o televidentes, y que los espacios de los medios deben utilizarse en asuntos que él o una junta editorial consideran importantes. Y es así: por muy equivocados que puedan andar, pues donde manda capitán…


Y que cosas, puede ser que para el lector sea más importante esa nota aparentemente tonta o sin esencia, puede convertirse en lo más leído o lo más esperado. Es que nunca debemos separarnos tanto de la filosofía popular que siempre nos remitirá a que “para gusto los colores”, “sobre gustos nada está escrito” y así por el estilo.


En lo referente a temas políticos, la libertad sigue siendo de presión no de expresión. El o los propietarios del medio presionan a la junta editorial, esta, a su vez, presiona a sus subalternos y así hasta que se llega a quien ejecuta la información, que ya va limitado por la línea editorial, por los intereses políticos del medio y, por supuesto, con la cautela a tener para no arriesgarse frente a los anunciantes. Todo esto transmite un mensaje, incluso de manera subconsciente, de tal forma que el periodista o escritor ya carga consigo, aunque sea impuesta, su dosis de autocensura.


En países pequeños y más dependientes es todavía más fuerte la libertad de ‘presión’, pues sometidos al eterno cacicazgo existen individuos o grupos a los que no debe tocárseles  ni con el pétalo de una rosa, entonces la libertad de expresión se ve sometida una vez más por la libertad de ‘presión.’


Si se trata de medios estatales, pues la misma palabra ‘estatal’ lo dice todo, es del Estado, la maneja el Gobierno y por supuesto que nadie se hará el haraquiri atentando contra sí mismo, contra sus propios intereses. Entonces de la ideología que sea el Gobierno, esta prensa estatal está para defender, cuidar los intereses del Gobierno, por tanto sin pensarlo, y sin siquiera considerarlo ellos censura, vuelve a imponerse la ‘presión’ contra la expresión’.


Se habla también de la libertad de expresión que tienen la llamada prensa alternativa o prensa independiente, tampoco es cierta, vuelve a ser relativa porque lo que allí se emita tiene que ir, obligadamente, en la corriente de pensamiento de él o los propietarios, o en total acuerdo por las razones por la que equis organización creó este o aquel medio. Siempre la ‘presión, supera a la expresión.


En estos tiempos de Internet puede decirse que existe un poco más de libertad de expresión, pero para países desarrollados en donde todo el mundo tiene acceso a las computadoras, en el caso de los nuestros de acceso tan limitado, se convierte en otro disfraz de la censura o de la ‘presión’ de la pobreza contra la libertad de expresión. Tan así que hay quienes le temen al Internet o no lo consideran una herramienta periodística e informativa sino un puro divertimento.


Ahora existe otra censura externa, esta ya no solo atenta contra el individuo sino contra los medios, las mafias del narcotráfico, por ejemplo, que llevan cantidad de atentados contra medios y muerte a periodistas a quienes consideran que atacaban sus intereses. Por supuesto, ante esta ‘presión’ de muerte, cualquiera, sin que se lo pidan, crea sus escudos defensores que no son otros que la autocensura. Así que desde donde se le vea, la total libertad de expresión es un mito. Desde luego, existen medios con más libertad que otros, quienes informan y quienes deforman.


En Honduras ya ha habido más de una decena de periodistas muertos, también ha habido represión y atropellos directos contra ciertos medios y periodistas, y por ello ya se considera una situación grave desempeñar el periodismo de verdad, al igual que en otros países considerados de alto riesgo contra la libertad de expresión.


Así que ante tanta libertad de ‘presión’, al periodista y/o escritor no le queda sino ingeniárselas buscando recovecos lingüísticos, imágenes fílmicas o cualquier recurso para que pese a tanta ‘presión’ pueda sobrevivir aunque sea un poco de su auténtica expresión. 


Nueva York NY 03 abril 2011.

No hay comentarios:

Publicar un comentario